Txomin Barullo no es un personaje inventado por nuestra Konpartsa, sino que fue una persona real, una persona de carne y hueso, bilbaíno de pro, muy conocido en nuestro botxo y admirado por todos los que convivieron con él.
Emiliano de Arriaga incluye en su “Lexicón etimológico, naturalista y popular del bilbaíno neto” la palabra “Chomin”, definiéndolo como: “Domingo; no el día de precepto, sino el nombre propio de varón. (…) Conocimos un famoso “Chomin”: “Chomin Barullo”; hombre de grandes aptitudes e inteligencia superior, sumamente simpático y, como tal, relacionado aquí con todo el mundo“.
Pero los halagos para este ilustre personaje no termina aquí, sino que Arriaga continúa definiéndole como una persona “de corazón noble y generoso, carácter bromista y bullanguero, acendrado bilbainismo y conocimientos enciclopédicos. Era el pie indispensable para toda fiesta popular, procesión, baile, concierto, etcétera. Era, además, buen mozo y gran organizador, que lo mismo servía para un fregado que para un barrido“.
¿Pero, ¿cuál era la verdadera identidad de este ilustre y admirado personaje? Como nos sigue contando Emiliano de Arriaga, su verdadero nombre era Domingo de Sagarmínaga, “inolvidable” y a quien tanto “se echa de menos en este pueblo“.
El nombre de Txomin Barullo proviene de un personaje bilbaíno amante del txikiteo o poteo por el casco viejo, de nombre Txomin. Junto a su afición txikitera estaba el cantar canciones y muchas veces hacerlo por un pote, con todo lo cual generaba mucho barullo en bares y las calles. Fue un personaje real que era quien organizaba las fiestas de Bilbao principios del siglo XX. Con ese alma fiestera y popular se tomó el nombre de este personaje para el colectivo.
¿Quien fue Txomin Barullo?
Txomin Barullo no es un personaje inventado por nuestra Konpartsa, sino que fue una persona real, una persona de carne y hueso, bilbaíno de pro, muy conocido en nuestro botxo y admirado por todos los que convivieron con él.
Emiliano de Arriaga incluye en su “Lexicón etimológico, naturalista y popular del bilbaíno neto” la palabra “Chomin”, definiéndolo como: “Domingo; no el día de precepto, sino el nombre propio de varón. (…) Conocimos un famoso “Chomin”: “Chomin Barullo”; hombre de grandes aptitudes e inteligencia superior, sumamente simpático y, como tal, relacionado aquí con todo el mundo“.
Pero los halagos para este ilustre personaje no termina aquí, sino que Arriaga continúa definiéndole como una persona “de corazón noble y generoso, carácter bromista y bullanguero, acendrado bilbainismo y conocimientos enciclopédicos. Era el pie indispensable para toda fiesta popular, procesión, baile, concierto, etcétera. Era, además, buen mozo y gran organizador, que lo mismo servía para un fregado que para un barrido“.
¿Pero, ¿cuál era la verdadera identidad de este ilustre y admirado personaje? Como nos sigue contando Emiliano de Arriaga, su verdadero nombre era Domingo de Sagarmínaga, “inolvidable” y a quien tanto “se echa de menos en este pueblo“.
El nombre de Txomin Barullo proviene de un personaje bilbaíno amante del txikiteo o poteo por el casco viejo, de nombre Txomin. Junto a su afición txikitera estaba el cantar canciones y muchas veces hacerlo por un pote, con todo lo cual generaba mucho barullo en bares y las calles. Fue un personaje real que era quien organizaba las fiestas de Bilbao principios del siglo XX. Con ese alma fiestera y popular se tomó el nombre de este personaje para el colectivo.